Este término tiene relación con el mundo del análisis de datos en tanto en cuanto los datos no estructurados son precisamente los que han protagonizado la revolución del big data por su capacidad de almacenamiento en tiempo real. Son aquellos que se encuentran en el formato tal y como fueron recogidos. Carecen de un formato específico. No se pueden almacenar en tablas porque no se puede desgranar su información a tipos más básicos de datos. Ejemplos de datos no estructurados son PDF, correos electrónicos, imágenes…